Liturgia

26º Semana del Tiempo Común – Lunes

Evangelho (Lc 9,46-50) — O Senhor esteja convosco. — Ele está no meio de nós. — Proclamação do Evangelho de Jesus Cristo + segundo Lucas. — Glória a vós, Senhor. Naquele tempo, 46houve entre os discípulos uma discussão, para saber qual deles seria o maior. 47Jesus sabia o que estavam pensando, pegou então uma criança, colocou-a junto de si 48e disse-lhes: “Quem receber esta criança em meu nome, estará recebendo a mim. E quem me receber, estará recebendo aquele que me enviou. Pois aquele que entre todos vós for o menor, esse é o maior”. 49João disse a Jesus: “Mestre, vimos um homem que expulsa demônios em teu nome. Mas nós lho proibimos, porque não anda conosco”. 50Jesus disse-lhe: “Não o proibais, pois quem não está contra vós, está a vosso favor”.

26º Domingo del Tiempo Común

Evangelio (Marcos 9:38-43, 45, 47-48) — El Señor esté con vosotros. — Y con tu espíritu. — Proclamación del Evangelio de Jesucristo + según San Marcos.  — Gloria a Ti, Señor. 38 Juan le dijo: «Maestro, hemos visto a uno que expulsaba demonios en tu nombre y no viene con nosotros y tratamos de impedírselo porque no venía con nosotros.» 39 Pero Jesús dijo: «No se lo impidáis, pues no hay nadie que obre un milagro invocando mi nombre y que luego sea capaz de hablar mal de mí. 40 Pues el que no está contra nosotros, está por nosotros.» 41 «Todo aquel que os dé de beber un vaso de agua por el hecho de que sois de Cristo, os aseguro que no perderá su recompensa.» 42 «Y al que escandalice a uno de estos pequeños que creen, mejor le es que le pongan al cuello una de esas piedras de molino que mueven los asnos y que le echen al mar. 43 Y si tu mano te es ocasión de pecado, córtatela. Más vale que entres manco en la Vida que, con las dos manos, ir a la gehenna, al fuego que no se apaga. 45 Y si tu pie te es ocasión de pecado, córtatelo. Más vale que entres cojo en la Vida que, con los dos pies, ser arrojado a la gehenna. 47 Y si tu ojo te es ocasión de pecado, sácatelo. Más vale que entres con un solo ojo en el Reino de Dios que, con los dos ojos, ser arrojado a la gehenna, 48 donde su gusano no muere y el fuego no se apaga;

25º Semana del Tiempo Común – Sábado

Evangelio (Juan 1:47-51) — El Señor esté con vosotros. — Y con tu espíritu. — Proclamación del Evangelio de Jesucristo + según San Juan.  — Gloria a Ti, Señor. 47 Vio Jesús que se acercaba Natanael y dijo de él: «Ahí tenéis a un israelita de verdad, en quien no hay engaño.» 48 Le dice Natanael: «¿De qué me conoces?» Le respondió Jesús: «Antes de que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera, te vi.» 49 Le respondió Natanael: «Rabbí, tú eres el Hijo de Dios, tú eres el Rey de Israel.» 50 Jesús le contestó: «¿Por haberte dicho que te vi debajo de la higuera, crees? Has de ver cosas mayores.» 51 Y le añadió: «En verdad, en verdad os digo: veréis el cielo abierto y a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del hombre.»

25º Semana del Tiempo Común – Viernes

Primera lectura (Eclesiastés 3:1-11) 1 Todo tiene su momento, y cada cosa su tiempo bajo el cielo: 2 Su tiempo el nacer, y su tiempo el morir; su tiempo el plantar, y su tiempo el arrancar lo plantado. 3 Su tiempo el matar, y su tiempo el sanar; su tiempo el destruir, y su tiempo el edificar. 4 Su tiempo el llorar, y su tiempo el reír; su tiempo el lamentarse, y su tiempo el danzar. 5 Su tiempo el lanzar piedras, y su tiempo el recogerlas; su tiempo el abrazarse, y su tiempo el separarse. 6 Su tiempo el buscar, y su tiempo el perder; su tiempo el guardar, y su tiempo el tirar. 7 Su tiempo el rasgar, y su tiempo el coser; su tiempo el callar, y su tiempo el hablar. 8 Su tiempo el amar, y su tiempo el odiar; su tiempo la guerra, y su tiempo la paz. 9 ¿Qué gana el que trabaja con fatiga? 10 He considerado la tarea que Dios ha puesto a los humanos para que en ella se ocupen. 11 El ha hecho todas las cosas apropiadas a su tiempo; también ha puesto el mundo en sus corazones, sin que el hombre llegue a descubrir la obra que Dios ha hecho de principio a fin.

25º Semana del Tiempo Común – Jueves

Evangelho (Lc 9,7-9) — O Senhor esteja convosco. — Ele está no meio de nós. — Proclamação do Evangelho de Jesus Cristo + segundo Lucas. — Glória a vós, Senhor. Naquele tempo, 7o tetrarca Herodes ouviu falar de tudo o que estava acontecendo, e ficou perplexo, porque alguns diziam que João Batista tinha ressuscitado dos mortos. 8Outros diziam que Elias tinha aparecido; outros ainda, que um dos antigos profetas tinha ressuscitado. 9Então Herodes disse: “Eu mandei degolar João. Quem é esse homem, sobre quem ouço falar essas coisas?” E procurava ver Jesus.

25º Semana del Tiempo Común – Miércoles

Primera lectura (Proverbios 30:5-9) 5 Probadas son todas las palabras de Dios; él es un escudo para cuantos a él se acogen. 6 No añadas nada a sus palabras, no sea que te reprenda y pases por mentiroso. 7 Dos cosas te pido. no me las rehúses antes de mi muerte: 8 Aleja de mí la mentira y la palabra engañosa; no me des pobreza ni riqueza, déjame gustar mi bocado de pan, 9 no sea que llegue a hartarme y reniegue, y diga: «¿Quién es Yahveh?». o no sea que, siendo pobre, me dé al robo, e injurie el nombre de mi Dios.

25º Semana del Tiempo Común – Martes

Primera lectura (Proverbios 21:1-6, 10-13) 1 Corriente de agua es el corazón del rey en la mano de Yahveh, que él dirige donde quiere. 2 Al hombre le parecen rectos todos sus caminos, pero es Yahveh quien pesa los corazones. 3 Practicar la justicia y la equidad, es mejor ante Yahveh que el sacrificio. 4 Ojos altivos, corazón arrogante, antorcha de malvados, es pecado. 5 Los proyectos del diligente, todo son ganancia; para el que se precipita, todo es indigencia. 6 Hacer tesoros con lengua engañosa, es vanidad fugitiva de quienes buscan la muerte. 10 El alma del malvado desea el mal, su vecino no halla gracia a sus ojos. 11 Cuando se castiga al arrogante, el simple se hace sabio; cuando se instruye al sabio, adquiere ciencia. 12 El Justo observa la casa del malvado, y arroja a los malvados a la desgracia. 13 Quien cierra los oídos a las súplicas del débil clamará también él y no hallará respuesta.

25º Semana del Tiempo Común – Lunes

Primera lectura (Proverbios 3:27-34) 27 No niegues un favor a quien es debido, si en tu mano está el hacérselo. 28 No digas a tu prójimo: «Vete y vuelve, mañana te daré», si tienes algo en tu poder. 29 No trames mal contra tu prójimo cuando se sienta confiado junto a ti. 30 No te querelles contra nadie sin motivo, si no te ha hecho ningún mal. 31 No envidies al hombre violento, ni elijas ninguno de sus caminos; 32 porque Yahveh abomina a los perversos, pero su intimidad la tiene con los rectos. 33 La maldición de Yahveh en la casa del malvado, en cambio bendice la mansión del justo. 34 Con los arrogantes es también arrogante, otorga su favor a los pobres.

25º Domingo del Tiempo Común

Evangelio (Marcos 9:30-37) — El Señor esté con vosotros. — Y con tu espíritu. — Proclamación del Evangelio de Jesucristo + según San Marcos. — Gloria a Ti, Señor. 30 Y saliendo de allí, iban caminando por Galilea; él no quería que se supiera, 31 porque iba enseñando a sus discípulos. Les decía: «El Hijo del hombre será entregado en manos de los hombres; le matarán y a los tres días de haber muerto resucitará.» 32 Pero ellos no entendían lo que les decía y temían preguntarle. 33 Llegaron a Cafarnaúm, y una vez en casa, les preguntaba: «¿De qué discutíais por el camino?» 34 Ellos callaron, pues por el camino habían discutido entre sí quién era el mayor. 35 Entonces se sentó, llamó a los Doce, y les dijo: «Si uno quiere ser el primero, sea el último de todos y el servidor de todos.» 36 Y tomando un niño, le puso en medio de ellos, le estrechó entre sus brazos y les dijo: 37 «El que reciba a un niño como éste en mi nombre, a mí me recibe; y el que me reciba a mí, no me recibe a mí sino a Aquel que me ha enviado.»   [cn-embed id='8437']reflexion_dominical_-_23/09/2018[/cn-embed]

24º Semana del Tiempo Común – Sábado

Evangelho (Lc 8,4-15) — O Senhor esteja convosco. — Ele está no meio de nós. — Proclamação do Evangelho de Jesus Cristo + segundo Lucas. — Glória a vós, Senhor. Naquele tempo, 4reuniu-se uma grande multidão, e de todas as cidades iam ter com Jesus. Então ele contou esta parábola: 5“O semeador saiu para semear a sua semente. Enquanto semeava, uma parte caiu à beira do caminho; foi pisada e os pássaros do céu a comeram. 6Outra parte caiu sobre pedras; brotou e secou, porque não havia umidade. 7Outra parte caiu no meio de espinhos; os espinhos cresceram juntos, e a sufocaram. 8Outra parte caiu em terra boa; brotou e deu fruto, cem por um”. Dizendo isso, Jesus exclamou: “Quem tem ouvidos para ouvir ouça”. 9Os discípulos lhe perguntaram o significado dessa parábola. 10Jesus respondeu: “A vós foi dado conhecer os mistérios do Reino de Deus. Mas aos outros, só por meio de parábolas, para que olhando não vejam, e ouvindo não compreendam. 11A parábola quer dizer o seguinte: A semente é a Palavra de Deus. 12Os que estão à beira do caminho são aqueles que ouviram, mas, depois, vem o diabo e tira a Palavra do coração deles, para que não acreditem e não se salvem. 13Os que estão sobre a pedra são aqueles que, ouvindo, acolhem a Palavra com alegria. Mas eles não têm raiz: por um momento acreditam; mas na hora da tentação voltam atrás. 14Aquilo que caiu entre os espinhos são os que ouvem, mas, com o passar do tempo são sufocados pelas preocupações, pela riqueza e pelos prazeres da vida, e não chegam a amadurecer. 15E o que caiu em terra boa são aqueles que, ouvindo com um coração bom e generoso, conservam a Palavra, e dão fruto na perseverança”.